Las bibliotecas públicas gallegas piden más inversiones para dejar su “estado durmiente”

La actual Rede de Bibliotecas de Galicia incluye, según datos de 2023, a unos 300 centros públicos en todo el territorio gallego. Los datos también señalan que 2022 cerró con algo más de 1.6 millones de préstamos, un 23% más que en 2021. Sin embargo, los centros que gestiona directamente la Xunta de Galicia registraron 750.000 préstamos, 5.6 puntos por encima del año anterior. Más de 130.000 de dichos préstamos se realizaron a través de la plataforma GaliciaLe. Aun así, profesionales de las bibliotecas públicas señalan que la situación de la mayoría de estos centros es de “un estado durmiente”, sobre todo habiendo una Lei de Bibliotecas de Galicia que está por desarrollar de forma completa. Desde la Xunta de Galicia se resaltan las diferentes iniciativas que se han puesto en marcha como las furgonetas-biblioteca para cubrir de forma móvil lugares que no tienen espacios de lectura. 

RED DE BIBLIOTECAS

Cristina Rubal, subdirectora general de Bibliotecas y del Libro, señala que para este 2024 no descarta la apertura de nuevas bibliotecas públicas en ayuntamientos, lo cual aumentaría el catálogo de fondos. Por otra parte, siguen con actividades de dinamización para toda la red pública. También se espera que para este año se ponga en marcha una tercera “furgoteca”. Mantienen la actividad en el servicio de préstamo GaliciaLe que contará con una APP para reservar un libro o audiovisual además de crear el GaliciaLe+ para personas de fuera de Galicia que deseen leer libros en gallego.
 

La Rede de Bibliotecas de Galicia gestiona directamente seis grandes bibliotecas de titularidad estatal y autonómica, junto a ellas la llamada Biblioteca de Galicia, en la Cidade da Cultura, que no es una biblioteca generalista sino de conservación, difusión y preservación. Sin embargo, la mayoría de la red la conforman bibliotecas de titularidad municipal, existiendo 31 ayuntamientos con subredes (biblioteca central y pequeños espacios de lectura repartidos por todo el término local). 

Sobre la dinamización de las bibliotecas y animación a la lectura, se efectúan cada año unas 700 actividades a través del prograla 'Ler conta moito' (Leer cuenta mucho). Las mejoras de gestión electrónica e intercambio se realiza desde Santiago a través de AMTEGA. Por otra parte hay un fondo de 350.000 euros que van a parar a los ayuntamientos que recibirán determinados importes según el número de habitantes, esto para la compra de libros y otro tipo de fondos y que se recomienda comprar a través de la red de librerías en cada ayuntamiento.

Por su parte, sobre la convocatoria de OPE para la cobertura de plazas en bibliotecas, Rubal apunta que son los ayuntamientos los que premanentemente convocan OPEs. En total, los procesos selectivos por año pueden oscilar entre cinco y diez, en ellos hay personal de la Consellería de Cultura en los tribunales de selección. Lo mismo sucede con las que son competencia de la Consellería y a las bibliotecas dependientes de otros departamentos autonómicos.

TRABAJADORES

Alberto Llano es miembro de BAMAD, una asociación sin ánimo de lucro que reúne profesionales de Archivos, Bibliotecas, Museos y Centros de Documentación de Galicia. Llano resalta que desde 2012 existe una ley de bibliotecas de Galicia pero que en estos momentos está prácticamente sin desarrollar. Entre otros muchos la definición de las diferentes tipologías de biblioteca. Además de eso, tampoco se ha descrito el tipo de personal que debe atenderlas.

Por otra parte, sí se reconoce desde BAMAD el esfuerzo de la Xunta en dotar de fondos a las bibliotecas públicas. Sin embargo, en casos como el programa 'Ler conta moito' el persupuesto está congelado. Así, las actividades destinadas a dinamizar las bibliotecas no son las mismas o disminuye su número porque cada año se van encareciendo. Un ayuntamiento con más de 5000 habitantes debe tener una biblioteca según la Ley de Bases de Régimen Local, aún así, “esa ley no dice qué es una biblioteca, con lo que nos podemos encontrar unas estanterías con libros, simplemente”. 
 

Sobre la incorporación de personal, BAMAD apunta la necesidad de reforzar el centro coordinador de la Rede de Bibliotecas. Esto serviría para perfilar el personal de cada una de las bibliotecas al darse casos de disparidad en el cuadro de personal: bibliotecas con un número muy reducido de auxiliares y otras con el doble de lo necesario, por ejemplo. Y otra cosa que preocupa en este sentido es que en los ayuntamientos el personal que atiende las bibliotecas locales son personas sin formación específica. Aquí la Xunta no intervendrá aludiendo a la independencia municipal.

La red de bibliotecas públicas en Galicia necesita, según sus trabajadores, mejoras en cuanto a la gestión tanto de presupuestos como de personal. Por otra parte, la Xunta de Galicia señala que esa misma red está en estos momentos ampliando ofertas al público. Aún así, la Lei de Bibliotecas de Galicia sigue sin desarrollarse y no hay por ahora visos de que esto cambie.