#Claves de la semana

Las "malas artes" de Carlos Simón con "amenazas y triquiñuelas" en las nóminas llevan a Ambulancias do Atlántico al borde de la huelga

El empresario, todavía desaparecido, sigue moviendo los hilos en la empresa intervendia por la administración gallega, que ayer celebró una nueva reunión infructuosa con los sindicatos. El comité de huelga acusa a la Xunta de no intervenir realmente el servicio y al empresario de, entre otras cosas, falsear documentos, enrevesar las nóminas para colapsar los servicios jurídicos de las fuerzas sindicales y de "vengarse" del personal de Ambulancias do Atlántico, que está en estos momentos muy cerca de anunciar una huelga en el servicio. 

 


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Foto: CIG

 

Tras más de un mes de crisis en Ambulancias do Atlántico, concesionaria del servicio urgente en Vigo, Moaña y Cangas, la situación sigue, si cabe, tan lejos de resolverse como al principio del conflicto que está arrastrando no a solo a los 260 trabajadores de la firma, sino también a los usuarios, que se enfrentan al riesgo de que las ambulancias, ya sea porque tienen que repostar en una única gasolinera en Vigo, ya sea porque su mantenimiento hoy no está ni mucho menos garantizado o ya sea por otros muchos factores que hoy complican el ejercicio de estos profesionales, no lleguen en tiempo y forma al lugar en el que se producen las emergencias. Un último encuentro entre las partes no ha servido para desbloquear la situación de una vez por todas. 

 

 

NUEVO CONTRATO

El encuentro se celebró con representantes del SERGAS, del 061 y de los sindicatos CIG, CC.OO., USO y de FS-TES, lo que motivó, según explica este último sindicato, que las otras fuerzas sindicales se levantasen de la reunión y abandonasen la sala. Lo que no hubo fue representación alguna de Ambulancias do Atlántico, a pesar de que el comité de huelga exigió en su día a Sanidade que nombrase un interlocutor con la empresa después de la última espantada de Carlos Simón. 

 

Esto despertó un profundo malestar entre los sindicatos, que dicen desconocer el nuevo organigrama de la empresa y censuran que el interlocutor sea "un abogado laboralista contratado por la empresa". "A día de hoy, el personal trabajador de la empresa desconoce a quién debe dirigirse para el más mínimo acto administrativo o realizar tareas logísticas simples como pedir un permiso laboral o solicitar la reparación de un vehículo", reprenden.

 

Los sindicatos también acusan a Carlos Simón de "dar indicaciones para que las nóminas que sí se entreguen estén hechas deliberada y enrevesadamente mal con el objetivo de colapsar los servicios jurídicos de los sindicatos, puesto que tendrían que calcular y rehacer una a una las nóminas de todo el año de 260 trabajadores". Por este motivo, trasladaron al SERGAS la petición de que sea la administración la que elabore las nóminas haciendo valer su figura de interventor, algo a lo que se han negado desde el SERGAS, siendo considerada una "nueva mentira de la Consellería en su compromiso de intervenir la empresa". 

 

 

SERVICIO INTERVENIDO, ¿PERO DE VERDAD?

Por ahora, el servicio sigue intervenido, garantizando así el pago de las nóminas. La cuestión que ocupa a Sanidade es la licitación del nuevo contrato urgente y que alguien se haga cargo del servicio de manera temporal. La Xunta plantea enviar una invitación a aquellas empresas que ya tienen adjudicados contratos con una propuesta de seis meses prorrogable a tres más. No obstante, cabe destacar que prácticamente todo el sector está atravesando dificultades en estos momentos, con situaciones críticas en otras empresas como Ambulancias Casablanca, Ambulancias Civera o en la UTE con servicio en el área de Lugo

 

Los tiempos que se manejan ahora mismo son los de iniciar ese nuevo contrato urgente el 1 de junio y ya para noviembre publicar el contrato con carácter ordinario, toda vez que ahora se está diseñando "el pliego para una nueva contratación común".

 

Desde el comité de huelga trasladaron a los medios después de este último encuentro que la reunión resultó un fracaso por el "incumplimiento por parte de la administración de los acuerdos alcanzados en la anterior reunión" y por su negativa a "asumir nuevos compromisos" y a entregar los documentos de nóminas que hacen "imposible el cálculo y la posible reclamación judicial del dinero que se le deba a la totalidad del plantel". 


"La empresa está sumida en un auténtico caos sin que su personal sepa a que órdenes de trabajo debe atender y desconociendo qué cargo ostentan las personas que actúan en la actualidad supuestamente en nombre del empresario Carlos Simón", critican desde el comité de empresa, al tiempo que asisten al engorde de las deudas tanto con los trabajadores como con los proveedores "haciendo muy complicado el trabajo diario".

 

 

"Restricciones de combustible, interrupción de la limpieza de los centros de trabajo y falta de reparaciones en las ambulancias o impagos de alquileres son, entre otros, algunos ejemplos de los graves problemas económicos que asolan a la Ambulancias del Atlántico, actualmente en bancarrota, que subsiste a base de adelantos económicos de la facturación del Sergas", desgrana el comité de empresa, que increpa a la Xunta por realizar "un tímido papel de mero observador" limitando su intervención a "lanzar recomendaciones al empresario y su entorno". 

 

Esta "nula intervención de la administración", como dicen, se traduce en unos plazos para la licitación que no han caído bien en el comité de huelga, que subraya la "gravísima situación actual que afecta al transporte sanitario". 

"El Sergas pretende continuar prestando servicio con Ambulancias del Atlántico y su administrador desaparecido durante, como mínimo, cuatro meses más", afirma el comité de huelga sobre el transporte programado, del que Ambulancias do Atlántico es concesionaria en el área de Vigo. A renglón seguido, los sindicatos sugieren que existen "pruebas de que los cálculos de coste del servicio para una nueva licitación están mal realizados a causa de la información incorrecta facilitada por Ambulancias del Atlántico, llegando incluso a incurrir nuevamente en falsedad documental". 

 

"Las organizaciones sindicales consideran que el estudio de costes publicado por la Consellería no incluye el gasto real de las nóminas del personal ni de los suministros. Por este motivo, sospechan que el contrato del servicio programado volverá a quedar desierto, teniendo que prolongarse por más tiempo en manos del empresario Carlos Simón", analizan.
 

En medio de este clima tan enrarecido, el comité de huelga también puso sobre la mesa su "malestar" por las "acusaciones de la Dirección del 061, responsabilizando a la Representación Legal de los Trabajadores de no tener paciencia, de no respetar la paz social e, incluso, responsabilizando a las personas trabajadoras de supuestos actos de sabotaje". En cambio, los sindicatos resaltan la "implicación" de todo el personal que mantiene a flote al servicio "con una dedicación digna de admiración". 

 

"Además, el Sergas considera que nos encontramos en una situación privilegiada, puesto que en otras situaciones semejantes ocurridas en otras áreas, la administración no se implicó tanto llegando a tener que recibir el pago de las nóminas con cargo al Fondo de Garantía Salarial pasados varios meses", dicen, declaraciones que "no hicieron más que complicar el diálogo, poniendo fin a la reunión". 

 

El comité culpa a la Xunta de "no prestar atención a los deberes legales que tiene la administración en cuanto al abono de salarios y cuotas a la Seguridad Social en caso de impagos por la empresa" y no oculta su temor a que el dinero público entregado a Simón en estos años no haya sido desviado en algún momento a otras empresas en las que participa el empresario, que ya tuvo problemas similares con la administración gallega hace unos años.

 

 

FS-TES

El sindicato FS-TES, fuera del comité de huelga, emitió un comunicado en el que pide "disculpas en nombre del sector" a los trabajadores del sector por el "comportamiento e imagen" de esta última reunión. "Los profesionales que hacen funcionar ambos servicios no merecen que se les asocie a una imagen de falta de respeto", valoran. En este sentido, ponen en consideración el esfuerzo de los profesionales que están "asumiendo la gestión de la empresa y asumiendo responsabilidades, trabajando fuera de hora para que el funcionamiento sea posible", a pesar de que algunos están "recibiendo amenazas personales y sobre sus bienes y, peor aún, sobre sus familias e hijos, con amenazas desde números ocultos o verbales". 

 

Al tiempo, denuncian las presuntas "presiones recibidas por parte de algunos proveedores al personal de coordinación y gestión de la empresa, los cuales están recibiendo un plan de pagos para una puesta al día". Esto empata con la advertencia que ya trasladaron a este diario desde el comité de huelga hace semanas, lamentando que ya había empresas de cobro a morosos llamando a las puertas de Ambulancias do Atlántico, sucediendo episodios desagradables de presiones en la propia sede de la firma. 

 

"Estas amenazas serán investigadas y tramitadas por la jurídica del sindicato, la administración hará lo mismo", apuntan. 

 

LA HUELGA, MÁS CERCA

En lo tocante a las autoridades sanitarias, desde el 061 insisten en que siguen con atención lo que está ocurriendo en el área de Vigo y que la Xunta "adoptó las medidas necesarias para evitar que se interrumpiese el servicio y garantizar el pago de las nóminas del mes de abril a los trabajadores". "En caso de acreditarse desajustes en las retribuciones percibidas por algunos trabajadores se tomarán las medidas para corregirlos en los próximos días", anotan. 

 

"La administración autonómica le pide a los representantes sindicales responsabilidad y ánimo constructivo, toda vez que algunos de ellos abandonaron la reunión, y teniendo en cuenta la máxima voluntad de diálogo y de implicación que están demostrando los responsables autonómicos", apostillan desde el 061. 

 

Sin embargo, las impresiones que llegan desde el comité de huelga es que su paciencia se ha visto colmada y que la huelga está cada vez más cerca, después de desconvocar los paros anunciados para los días 2 y 3 de mayo y de entender que Simón está "aprovechando" la situación para "aumentar el clima de crispación entre el personal", considerando "demostrado" que el empresario "está dando indicaciones desde su exilio en Cataluña a su personal de confianza para que actúen a modo de venganza, persiguiendo la algunos trabajadores con actos que pueden suponer penas de prisión para los actuales responsables de la empresa". 

 

Con denuncias por "acoso laboral, persecución, vulneración de derechos sindicales y mismo despidos" ya en marcha, las opciones de que se anuncie la convocatoria de una huelga en Ambulancias do Atlántico cobra peso, ya que, a juicio de los sindicatos, "no está garantizado el abono de las nóminas de mayo antes de 1 de junio" en estos momentos. 

 

"La representación de CIG, CCOO y USO volverá a celebrar asambleas en las que planteará una nueva convocatoria de huelga, así como recrudecer el calendario de protestas en espera de una respuesta por parte de la Xunta de Galicia, que se niega en rotundo a asumir directamente el servicio de asistencia y transporte sanitario público, cambiando el modelo actual de prestación del servicio con empresas concesionarias privadas", concluyen. 

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