Esto es cuanto se sabe de los boirenses relacionados con los 1.300 kilos de cocaína intervenidos en Camariñas

En las primeras horas del jueves solo era un rumor que circulaba de móvil en móvil por Boiro. La noticia de la detención de un joven en Camariñas con más de 1.300 kilos de cocaína comenzó a correr como la pólvora por la localidad barbanzana. El runrún se confirmó definitivamente al día siguiente, con las primeras imágenes. "¡Es el 'E.T.'! Ya sabía que no andaba en nada bueno", comenta una vecina de Cabo de Cruz, parroquia a la que también pertenece el detenido, de 26 años y un viejo conocido de las autoridades, que lo pillaron a bordo del pesquero con 45 fardos de la droga.

El de Camariñas fue el último gran golpe al narcotráfico en Galicia, que en lo que va de 2023 acumula muchos titulares, desde la detección de un narcosubmarino hasta el abordaje del 'Sophie' a finales de julio, pasando por las narcolanchas que aparecieron varadas en distintos puntos de la costa. La comunidad vuelve a ser la gran puerta de entrada de la droga en Europa y el goteo constante de operaciones policiales confirman que los carteles tienen nuevamente en su punto de mira a las rías gallegas para traer el producto al Viejo Continente.

RADIOGRAFÍA

La de 'E.T.' -alias por el que se conoce a B. M. R., el joven boirense detenido- es solo una de las muchas historias que individualmente componen el relato del narcotráfico en Galicia. Se trata de un rostro conocido de las autoridades, un muchacho de una población con tradición marinera como Cabo de Cruz, con conocimientos de navegación y raíces en pleno corazón de la ría de Arousa. 

Se dan así todos los ingredientes para que el más mínimo movimiento o sospecha lleve a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a iniciar una investigación tan minuciosa como la llevada a cabo en la Costa da Morte. 

BUSCA Y CAPTURA

En su caso, desde la Fundación Galega Contra o Narcotráfico aplauden la decisión de enviar a prisión provisional y sin fianza al investigado por un delito contra la salud pública, mientras las autoridades siguen la pista a un segundo implicado, también boirense y propietario de la embarcación que adquirió al comprársela a un marinero de Camelle recientemente jubilado, en un caso que avanza bajo secreto de sumario. Este segundo individuo permanece hasta la fecha en busca y captura. 

Quién manda la droga y quién era su destinatario final es lo que trae ahora de cabeza a las autoridades que dieron el golpe en el 'Nuevo Furuno', un pesquero de casco de madera de 12,6 metros de eslora con su base en Camelle, en Camariñas, que fue dado de alta en el registro del Ministerio de Pesca en junio de 1997 y que el pasado miércoles transportaba en su interior cerca de 50 millones de euros en cocaína cuando fue interceptado por el Grupo de Respuesta Especial para el Crimen Organizado (Greco), de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional, y por Vigilancia Aduanera.