Escotet

El Concello da Coruña y el club acuerdan la cesión gratuita del estadio municipal durante 25 años, incluyendo cláusulas curiosas como la de un a posible venta de las acciones por parte de Abanca.

El Dépor fue uno de esos afectados ya no solo por la crisis económica, sino también por los desmanes de sus dueños durante años, por las malas planificaciones deportivas y por su incapacidad para admitir que el juego había cambiado y que tocaba crecer desde la base, desde un sentimiento primario como el del deportivismo recalcitrante, ese que hizo a miles ir a ver al Deportivo penar por las catacumbas del fútbol nacional cada domingo durante cuatro años.

Reprocha la "decisión unilateral" de no acudir a la recepción institucional tras el ascenso a Segunda División

El venezolano, que no acudió a la fiesta de Riazor, lleva años intentando desprenderse del club. El Dépor ha sido una sangría constante para su fortuna y lo ha mantenido a flote para no perjudicar la imagen de Abanca. Ahora, tras el ascenso, se le presenta el dilema de si hacer caja, aunque sea asumiendo pérdidas. La cuestión es si hay alguien en Galicia dispuesto a comprarlo.

La entidad blanquiazul, todavía lastrada por los números en rojo de sus cuentas, ve reforzada su viabilidad gracias al fallo de la jueza, que permite al club tener una mayor cintura. 

Los bajísimos tipos de interés que han lastrado el negocio bancario durante años hicieron que el mangnate venezolano no sacase ABANCA a bolsa. Con el nuevo entorno económico, con unos tipos de interés más alta y con los bancos encadenando beneficios record, las tornas pueden cambiar. 

El presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, ha asegurado que el banco ha "aparcado" la búsqueda de un socio industrial para Nueva Pescanova, por lo que en la actualidad está abordando un proceso de posicionamiento de la compañía para fortalecer su proyecto empresarial.

Comisiones Obreras se reunió con los trabajadores para explicar los siguientes pasos en la negociación de un ERE que amenaza al 25% de la plantilla.

Álvaro García Dieguez, el presidente del Consejo de Administración del Deportivo de A Coruña SAD desde este verano, ha declarado hoy que el club planea acabar con el concurso de acreedores y así poder volver a la Liga de Fútbol Profesional.

Escotet ha destacado que la entidad "quiere ser una palanca en la creación de empleo" y Rueda valora: "Abanca nos ha ayudado muchísimo en el último año"

La afición del Deportivo de A Coruña salió ayer  a las calles para expresar su malestar con el propietario del club.  Miles de aficionados herculinos, unos 2.000 según la prensa local, han exigido al banquero Juan Carlos Escotet de ABANCA que no acalle sus voces y que la inminente junta de accionistas sea presencial y no telemática como pretende el propietario venezolano.

Ni siquiera un coruñés de pro como el exitoso de la Barrera, que para siempre cargará con el mérito y la cruz de haber privado al Dépor del ascenso en su estadio con un gol postrero del Albacete, puede reflotar a este equipo. En el sótano del fracaso del Deportivo siempre hay una planta más.

Abanca ha llegado a un acuerdo para entrar en una fase de negociaciones exclusivas con el grupo canadiense Cooke la venta del 80% de la participación total del banco en Nueva Pescanova, según ha informado la entidad financiera en un comunicado.

La mandataria acusa al presidente del Dépor, propiedad de Abanca, de querer enfrentarla con los coruñeses, cuando estamos en precampaña electoral. Desde el club se indica que el Ayuntamiento busca que paguen por el uso del Estado de Riazor, poniendo al equipo en inferioridad de condiciones frente a sus rivales.

La adquisición de numerosas entidades le ha permitido expandir su red de oficinas fuera de Galicia, pero al mismo tiempo ha aplicado una política de recortes que ha dejado sin sucursales a muchos ayuntamientos del rural del país.

 El grupo anuncia en declaraciones a Galiciapress un recurso ante la Justicia, pues ya se ha cerrado la vía administrativa. 

Los pingües beneficios que está sacando Escotet de la entidad producto de las rescatadas y después malvendidas cajas de ahorros de Galicia están alimentando una agresiva política de expansión del banquero venezolano dueño de Banesco.

Los negocios del banquero Juan Carlos Escotet en España siguen viento en popa. Hoy se conocen los resultados de Abanca en lo que llevamos de año y el ranking Forbes de los más ricos en España. Ambos traen buenas noticias para el multimillonario venezolano.

El Banco Central Europeo, tras hacerle pruebas de resistencia a Abanca, obliga a la marca gallega del Grupo Banesco a aumentar sus reservas ante riesgos no previstos. En concreto, deben pasar del 1,75% al 2% del capital. Es decir, le ha subido la exigencia en un 14%. 

El año pasado la marca gallega clausuró medio centenar de oficinas, sobre todo en el rural y en barrios. Algo que no se ha traducido en la retirada de fondos y contribuye a que el dueño Juan Carlos Escotet aumente su fortuna, que ya es la quinta mayor de España.